Aunque el empleo formal creció levemente en abril, los salarios siguen perdiendo poder adquisitivo.
El mercado laboral argentino sigue mostrando señales de fragilidad: en abril, el empleo formal registrado creció apenas un 0,1% mensual, pero el salario real volvió a caer, encadenando así cuatro meses consecutivos en baja. Con los datos proyectados de mayo, los ingresos ya se ubican un 1,4% por debajo del nivel de noviembre de 2023, cuando asumió Javier Milei la presidencia.
La cifra preocupa aún más al considerar el acumulado de 2024: entre enero y mayo, el poder adquisitivo de los salarios formales retrocedió un 5,5%, según estimaciones del economista Luis Campos. “Los salarios no paran de caer y eso es asimilable a una fuerte crisis”, sostuvo Federico Pastrana, de C-P Consultora.
Pérdida de puestos de trabajo desde noviembre
A pesar del leve repunte en abril, el empleo registrado aún no se recupera: desde la asunción del nuevo gobierno se perdieron 183.447 puestos de trabajo, lo que expone la profundidad de la recesión y el escaso dinamismo del mercado.
De acuerdo con el informe del Ministerio de Trabajo, en abril hubo 12,8 millones de personas con empleo registrado, unas 14.600 más que en marzo. De ese total, 6,28 millones fueron asalariados privados (con un aumento del 0,2%) y 2,7 millones trabajadores independientes (monotributistas y autónomos).
Los sueldos no alcanzan a la inflación
La remuneración bruta promedio fue de $1.679.334, apenas un 0,2% por encima de marzo. La mediana salarial fue de $1.232.516, con una suba del 2,4%. Ambas quedaron por debajo del 2,8% de inflación de abril, lo que implica una nueva pérdida en términos reales.
En mayo, el panorama no mejoró: los datos preliminares proyectados por convenios colectivos muestran una nueva caída, dejando el salario 1,4% por debajo del nivel de noviembre de 2023.
Para los empleados públicos, la situación es aún peor: los sueldos cayeron 15,5% en términos reales desde fines de 2023 y, en el caso de los estatales nacionales, el retroceso llegó al 31,6%, según Campos.
Empleo estancado: mejora leve en el privado, caída en casas particulares
El empleo asalariado privado mostró una leve mejora en abril, con un crecimiento del 0,2%, cortando una racha de bajas en meses previos. Sin embargo, según Pastrana, “la tendencia es de estancamiento, con subas y bajas sin un patrón firme”.
El sector público creció apenas un 0,1%, mientras que el empleo en casas particulares cayó un 0,3% mensual y acumula una baja del 3% interanual. “Es el nivel más bajo de los últimos 12 años en este sector”, remarcó Campos.
El trabajo independiente se mantuvo casi estable, aunque el monotributo social cayó un 1,6% mensual y un 63% interanual, producto de reempadronamientos y cambios normativos. El monotributo común creció un 0,3% y los autónomos cayeron un 0,2%.
Sectores que crecen y sectores que caen
Nueve sectores registraron crecimiento del empleo en abril, encabezados por:
Agricultura: +1,6%
Construcción: +0,8%
Actividades inmobiliarias y empresariales: +0,4%
Comercio y reparaciones: +0,2%
Enseñanza: +0,2%
En cambio, el empleo cayó en:
Pesca: -1,4%
Minería: -0,6%
Transporte y comunicaciones: -0,2%
Servicios comunitarios: -0,1%
Industria manufacturera: -0,1%
El comercio fue el sector que más empleo generó desde noviembre, con 24.295 nuevos puestos. La industria, en cambio, perdió 32.455 empleos.
Más empleo, pero sueldos cada vez más bajos
Mientras el empleo formal da señales de leve recuperación, los salarios siguen perdiendo poder adquisitivo y no logran seguirle el ritmo a la inflación. Con más de 183 mil empleos perdidos en lo que va de la gestión Milei y una caída real del 5,5% en los ingresos, el mercado laboral argentino enfrenta un escenario de recuperación parcial con fuertes desigualdades sectoriales.