Cedió un punto respecto del 3,1% que mostró en enero.
Con este resultado, la variación interanual se ubicó en 79,4%, mientras que el dato mensual marcó una fuerte desaceleración de un punto respecto de enero, cuando la inflación había sido del 3,1%.
Este comportamiento refuerza las expectativas del Gobierno nacional, que proyecta que la inflación a nivel país se ubique cerca del 2,2%, cifra alcanzada en el primer mes del año.
Factores clave de la desaceleración
La baja en la inflación estuvo vinculada a un menor ritmo de aumento en los servicios, aunque algunos rubros siguieron mostrando subas significativas:
Alimentos y bebidas no alcohólicas: aumentó 2,5%, con un impacto de 0,45 puntos porcentuales en el nivel general. Dentro de la división, los principales incrementos se registraron en:
- Carnes y derivados (+7,7%).
- Leche, productos lácteos y huevos (+1,4%).
- Pan y cereales (+1,0%).
Vivienda y tarifas de servicios: registró una suba del 3,1%, aportando 0,60 puntos porcentuales a la variación mensual. Este incremento estuvo vinculado a las actualizaciones en alquileres y expensas.
Salud: aumentó 3%, impulsado por los ajustes en las cuotas de la medicina prepaga.
En el análisis por categoría, los bienes subieron 1,9%, mientras que los servicios avanzaron 2,1%, confirmando la tendencia de una menor presión inflacionaria en este sector.