El Gobierno y el Banco Central de Argentina anunciaron este viernes un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para que el organismo preste al país US$ 20.000 millones y el levantamiento del cepo cambiario ―restricción a la compra de dólares.
El ministro de Economía, Luis Caputo, dijo en rueda de prensa que el objetivo del acuerdo con el FMI —cuyas negociaciones él mismo había dado a conocer en marzo— es que el país tenga recursos para capitalizar al Banco Central. El préstamo fue aprobado de forma preliminar esta semana y, según Caputo, se espera que este viernes el Directorio Ejecutivo del FMI otorgue el visto bueno definitivo.
El presidente del Banco Central, Santiago Bausili, leyó en la misma conferencia el comunicado sobre el levantamiento del cepo que la institución publicó momentos antes.
La medida consiste en que el precio del dólar flotará libremente entre dos bandas “en función de las fuerzas de la oferta y la demanda”, dijo el Banco Central. El rango del tipo de cambio irá de los 1.000 a los 1.400 pesos por dólar, agregó. Así, el gobierno intervendría cuando la cotización se aproximara a esos límites.
El cepo se levantará para los ciudadanos —personas físicas— a partir del lunes, con lo que se eliminarán las restricciones para entrar el Mercado Libre de Cambios (MLC), indicó el Banco Central. El cepo seguirá por ahora para las empresas —personas jurídicas.
Tanto el Gobierno como el Banco Central dijeron que estas medidas ayudarán a estabilizar la economía y a reducir la inflación, dos de las promesas del presidente Javier Milei.
Por su parte, Milei dio un mensaje en cadena nacional celebrando que el Fondo Monetario Internacional haya aprobado un préstamo para el país, así como la decisión de levantar las restricciones o cepo al tipo de cambio peso-dólar.
“Hace algunos minutos, el Fondo Monetario anunció un programa inédito para la Argentina, que cumplirá un papel importante en hacer esto posible. Digo inédito porque es la primera vez en la historia que el Fondo aprueba un programa que no es para financiar la transición de una macroeconomía desordenada a una ordenada, sino para respaldar un plan económico que ya ha rendido sus frutos”, aseguró.
Además, el presidente se refirió al cepo cambiario como “aberración que nunca debería haber existido”.